Un rebelde, erudito e insurgente que cambió la historia de México
¿Quién fue Miguel Hidalgo y Costilla?
Miguel Hidalgo y Costilla es uno de los personajes más importantes de la historia de México.
Se le conoce como el Padre de la Independencia, pero la verdad es que el cura murió mucho antes de que se concretara esa guerra.
Su vida fue una mezcla de rebeldía, erudición e insurgencia que lo llevó a pelearse con la iglesia e incluso a ser excomulgado.
Pero, ¿todo fue bueno? ¿Qué hay detrás de la imagen que tenemos de él? Esta es la historia no contada de un héroe patrio.
Miguel Hidalgo nació el 8 de mayo de 1753 en la Hacienda de Corralejo, en Guanajuato.
Estudió en el Colegio de San Nicolás Valladolid, del que llegó a ser rector; en 1778, fue ordenado sacerdote y en 1803 se hizo cargo de la parroquia de Dolores.
Allí se dedicó a mejorar las condiciones de vida de los indígenas y a fomentar la cultura y la ciencia.
También se involucró en actividades políticas y conspiraciones contra el dominio español.
El 15 de septiembre de 1810, dio el famoso Grito de Dolores, con el que llamó a la insurgencia contra la Corona.
Junto con Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez, encabezó un ejército popular que logró algunas victorias, pero también sufrió derrotas.
A los cuatro meses de iniciar la lucha, fueron capturados en Coahuila y trasladados a Chihuahua, donde fueron juzgados y condenados a muerte.
Hidalgo fue fusilado el 30 de julio de 1811 a las 7 de la mañana.
Su cabeza fue cortada y exhibida en una jaula en la Alhóndiga de Granaditas.
Aunque fue un precursor del movimiento independentista, el cura no logró ver a México libre, y el verdadero “Padre de la Patria” fue Agustín de Iturbide.
¿Cómo era Miguel Hidalgo y Costilla?
La imagen que tenemos de Hidalgo es una invención.
Jamás fue retratado en vida, por lo que no se sabe cómo era físicamente.
La imagen de un cura blanco con una larga túnica negra es una creación del emperador Maximiliano I de México, quien encargó al pintor Joaquín Ramírez un retrato del cura de Dolores, 50 años después de su muerte.
Según se dice, el pintor se basó en el rostro de un jardinero del Castillo de Chapultepec o en un sacerdote belga.
El motivo del emperador fue dar una identidad a los ciudadanos del Imperio.
Lo más cercano a Hidalgo es una estatua de madera hecha por el escultor Clemente Terrazas cuando el cura pasó por Guadalajara.
La escultura se puede ver en el Museo Nacional de Historia, en la Ciudad de México.
Sin embargo, según algunos testimonios históricos, Hidalgo era de tez morena.
“El teniente Pedro Armendáriz, comandante del pelotón que ejecutó a Miguel Hidalgo en la villa de Chihuahua en 1811 y por consiguiente testigo de su muerte, aseguraba que el cura de Dolores era de tez morena“, dice un fragmento del libro Los retratos de Hidalgo, de José Herrera Peña.
¿Qué hizo?
Miguel Hidalgo fue un hombre acaudalado que decidió luchar contra la Corona española tras verse afectado por el cobro de “impuestos absurdos“.
Fue un líder carismático que supo movilizar a las masas populares con su discurso libertario y su visión progresista.
Un intelectual que cultivó diversas disciplinas como la filosofía, la teología, la historia, la literatura, la música, la botánica y la astronomía.
Fue un innovador que introdujo el cultivo de la vid y la morera, la cría de gusanos de seda y la fabricación de cerámica y textiles en su parroquia.
Fue un rebelde que desafió las normas eclesiásticas y sociales de su época, teniendo hijos fuera del matrimonio, leyendo libros prohibidos y defendiendo los derechos de los indígenas.
Miguel Hidalgo fue un héroe patrio que no conoces.
Su legado es más que un nombre en calles, monumentos y estados.
Su legado es una inspiración para las generaciones presentes y futuras que buscan un México más justo, libre y soberano.