El Titan desapareció el domingo con cinco personas a bordo y se estima que tiene menos de 24 horas de aire
El domingo 18 de junio de 2023, una noticia sacudió al mundo: el submarino Titan, que realizaba una expedición turística a los restos del Titanic, se había perdido en las profundidades del océano Atlántico.
Desde entonces, se ha desplegado una operación de búsqueda y rescate sin precedentes para intentar localizar y salvar a las cinco personas que iban a bordo.
El Titan es un vehículo sumergible operado por OceanGate Expeditions, una compañía de exploración submarina que documenta el deterioro del emblemático crucero hundido hace más de un siglo y el ecosistema marino que floreció en el lugar con viajes anuales desde 2021.
Cada inmersión suele tener un piloto, tres pasajeros que pagan y un guía a bordo.
Una vez que estas personas están dentro del submarino, la escotilla se cierra con pernos y solo se puede volver a abrir desde el exterior.
¿Qué pasó con el submarino que exploraba el Titanic?
El domingo por la mañana, el Titan zarpó alrededor de las 6:00 a.m. en el Atlántico norte, a unos 700 kilómetros al sur de San Juan, Terranova, donde se encuentra el Titanic a casi 4 mil metros de profundidad.
Se esperaba que la inmersión durara unas cuatro horas, pero algo salió mal.
El submarino perdió contacto una hora y 45 minutos después de sumergirse y no volvió a dar señales de vida.
Según la información proporcionada por los guardacostas estadounidenses y la compañía organizadora del viaje, el Titan tenía oxígeno para unas 96 horas cuando partió.
Eso fijaba un plazo límite para el rescate entre las 6:00 y las 8:00 de la mañana del jueves 22 de junio.
Sin embargo, los expertos recalcaron que ese era un cálculo impreciso y que el tiempo podría alargarse si los pasajeros tomaron medidas para conservar el aire.
Tampoco se sabe si seguían con vida tras la desaparición del sumergible.
Desde el domingo por la tarde, se han enviado más barcos y aviones a la zona de la desaparición, y la Guardia Costera estadounidense dijo el jueves que un robot submarino enviado por un barco canadiense había alcanzado el fondo marino y empezado a buscar la embarcación.
Las autoridades confiaban en que los sonidos detectados bajo el mar pudieran reducir la zona de búsqueda, que se había ampliado a un área del doble del tamaño de Bahamas.
Sin embargo, aún había varios obstáculos.
No solo localizar el submarino, sino también llegar hasta él con equipo de rescate y llevarlo a la superficie, asumiendo que siguiera intacto.
Y todo eso debía ocurrir antes de que se acabara el oxígeno de los pasajeros.
¿No hay esperanza para los tripulantes de el Titan?
El doctor Rob Larter, geofísico marino del Servicio Antártico Británico, recalcó la dificultad de encontrar algo del tamaño del sumergible, que mide unos 6.5 metros de largo y casi 3 metros de alto.
“Estamos hablando de entornos completamente oscuros” en los que un objeto a unos metros puede pasar desapercibido, señaló.
“Es una situación de aguja en un pajar a menos que se tenga una ubicación muy precisa”.
La zona norte del Atlántico donde el Titan desapareció es propensa a la niebla y las tormentas, lo que la convierte en un entorno extremadamente difícil para llevar a cabo una misión de búsqueda y rescate, afirmó Donald Murphy, oceanógrafo que trabajó como científico en jefe de la Patrulla Internacional de Hielo de la Guardia Costera.
Entre tanto, se conocieron advertencias significativas sobre la seguridad de la embarcación que se habían expresado durante el desarrollo de la expedición.
Medios de todo el mundo informaron este jueves sobre la llegada de la hora crítica para el sumergible.
La televisora saudí por satélite Al Arabiya mostró un reloj con una cuenta regresiva de cuándo estimaban que podría acabarse el oxígeno del vehículo.
El capitán Jamie Frederick, del Primer Distrito de la Guardia Costera, dijo el miércoles que las autoridades aún tenían esperanza de salvar a los cinco tripulantes.
“Esta es una situación muy difícil y estamos haciendo todo lo posible para encontrarlos”, declaró.
Entre los pasajeros del Titan se encontraba , un ciudadano británico que fue uno de los primeros en viajar al Challenger Deep en el Pacífico, el punto más profundo conocido de la Tierra.
Su familia dijo que estaba cumpliendo su sueño de ver el Titanic y que confiaba en que fuera rescatado con vida.