Jetline, la atracción que terminó en tragedia
¿Qué pasó el domingo en el parque Gröna Lund?
El domingo 25 de junio de 2023, un día que debía ser de diversión y entretenimiento se convirtió en una pesadilla para los visitantes del parque de atracciones Gröna Lund, en Estocolmo, Suecia.
Un vagón de la montaña rusa Jetline se descarriló parcialmente y cayó desde una gran altura, provocando la muerte de una persona y heridas a otras nueve, entre ellas menores de edad.
Según testigos presenciales, el accidente ocurrió alrededor de las 11:39 horas locales (09H39 GMT), cuando se escuchó un ruido sordo y metálico, y luego las atracciones se pusieron a temblar.
Una sección de la parte delantera del vagón se desprendió y el tren se detuvo en medio de la vía, quedando el coche en cuestión inclinado sobre el borde.
Catorce personas iban a bordo del Jetline.
Los servicios de emergencia llegaron al lugar y trasladaron a los heridos al hospital.
La policía local abrió una investigación para determinar las causas del descarrilamiento.
El director del parque, Jan Eriksson, declaró en una rueda de prensa que era un día triste y que el parque cerraría durante al menos una semana.
¿Qué es Jetline y cómo funciona?
Jetline es una montaña rusa diseñada por el famoso constructor alemán Anton Schwarzkopf e inaugurada en 1988.
Es una de las atracciones más populares del parque Gröna Lund, que tiene 140 años de historia.
Jetline tiene una longitud de 800 metros y una altura máxima de 34 metros.
Sus vagones alcanzan una velocidad de unos 90 kilómetros por hora y realizan varias curvas, subidas y bajadas.
La montaña rusa funciona mediante un sistema de lanzamiento electromagnético que impulsa el tren desde la estación hasta la primera colina.
Luego, el tren sigue su recorrido por la gravedad hasta regresar a la estación.
Jetline tiene la particularidad de tener una colina de elevación curva, una anomalía entre las montañas rusas.
¿Qué riesgos tiene montar en una montaña rusa?
Montar en una montaña rusa es una actividad que genera adrenalina y emoción, pero también implica ciertos riesgos para la salud y la seguridad.
Algunos de los efectos que puede provocar son:
- Mareos, náuseas y vómitos por el movimiento brusco y los cambios de dirección.
- Dolores de cabeza, cuello y espalda por la presión que ejerce la fuerza centrífuga sobre el cuerpo.
- Lesiones internas o externas por golpes o caídas en caso de accidente o mal funcionamiento.
- Ataques cardíacos o derrames cerebrales por el estrés o la excitación excesiva.
Para evitar estos riesgos, se recomienda seguir las normas de seguridad que establece cada parque y cada atracción, como usar el cinturón o el arnés correctamente, no llevar objetos sueltos o peligrosos, no levantar los brazos o las piernas durante el recorrido y no montar si se tiene alguna condición médica que lo desaconseje.
Además, se debe tener en cuenta que las montañas rusas están sujetas a revisiones periódicas y controles de calidad para garantizar su buen estado y funcionamiento.
Los accidentes como el ocurrido en Suecia son muy raros y excepcionales.
