Desacuerdo público
La cantante Céline Dion ha mostrado su descontento ante el uso de su famosa canción «My Heart Will Go On» en un mitin político organizado por el expresidente Donald Trump. La artista canadiense, reconocida por su cautivadora voz y éxitos globales. No ha otorgado permiso para que su música sea utilizada en eventos de este tipo, especialmente en el reciente mitin de Trump en Montana, donde estuvo acompañado por J.D. Vance.
Posición firme de Céline Dion
El equipo de Céline Dion ha dejado claro que no se ha autorizado la reproducción de su música en campañas políticas y que no existe ningún tipo de apoyo hacia candidatos a través de sus canciones. Este incidente ha causado sorpresa, ya que el uso de «My Heart Will Go On» en un evento político es considerado inusual y fuera de lo convencional.
Implicaciones para futuras campañas
Este tipo de situaciones subraya la importancia de obtener permisos adecuados para el uso de música en eventos públicos. La campaña de Kamala Harris y Tim Walz. Por ejemplo, ha optado por evitar la asociación con celebridades durante la Convención Nacional Demócrata. Con el fin de evitar la percepción de un evento influenciado por Hollywood. Sin embargo, esto no descarta totalmente la aparición de figuras públicas, aunque en menor medida.
El expresidente Trump podría necesitar reconsiderar la inclusión de canciones de artistas como Céline Dion en sus rallies, especialmente dado que la cantante ha sido enfática en su desacuerdo y ha subrayado que no apoya a ningún candidato político mediante el uso de su música.
Este incidente ha generado un debate sobre los derechos de autor y el uso ético de la música en la política. Esto resaltando la necesidad de respetar las decisiones de los artistas respecto al uso de sus obras en contextos que podrían no alinearse con sus principios o creencias.
